El Partido Popular de Altea denuncia el “abandono progresivo” del Casco Antiguo y reclama un plan urgente de conservación

El Grupo Popular en el Ayuntamiento de Altea ha alzado la voz esta semana para denunciar lo que califica como un “abandono progresivo” del Casco Antiguo alteano, espacio declarado Bien de Interés Cultural (BIC) y considerado uno de los principales referentes patrimoniales y turísticos del municipio.

Según ha trasladado la portavoz del grupo, Rocío Gómez, “los vecinos están cansados” y, según indica, las quejas formales se acumulan en el registro municipal sin que el equipo de gobierno formado por Compromís y PSOE haya tomado medidas concretas para revertir la situación. En palabras de la edil, “ofrecen buenas palabras y ninguna solución”.

Entre las problemáticas detectadas, el Partido Popular señala la falta de limpieza, la acumulación de basuras, incluso en puntos sensibles como la entrada de la Plaza de la Iglesia, así como un deterioro del pavimento, con manchas y roturas que afectan tanto a la estética como a la seguridad del entorno. A ello se suma el “caos” generado por la circulación de vehículos durante las horas de carga y descarga, que carecería de control efectivo.

Otra de las cuestiones destacadas por el grupo de la oposición es el enredo de cableado visible que afecta a calles y fachadas, mientras a algunos residentes “se les niega el acceso a servicios básicos como la fibra óptica”. En este sentido, Gómez denuncia la existencia de una aplicación “arbitraria” de las normas de protección del BIC: “A algunos vecinos se les exige el más mínimo detalle, mientras otros actúan con total impunidad. Esa arbitrariedad genera frustración, abandono vecinal y una sensación generalizada de injusticia”.

En este contexto, el Partido Popular considera que el Casco Antiguo “está perdiendo su alma y su valor patrimonial”, y alerta del riesgo de que acabe convertido “en una postal vacía y deteriorada”. Por ello, ha anunciado que presentarán una moción en el próximo pleno municipal en la que instar al equipo de gobierno a impulsar un plan urgente de mantenimiento, vigilancia, limpieza y restauración del conjunto histórico.

La iniciativa también contemplará la revisión del marco normativo de protección con el objetivo de que “se aplique con sentido común y equidad”, evitando agravios comparativos entre residentes.

Gómez ha concluido afirmando que “no se puede proteger lo que no se cuida, y no se puede presumir de patrimonio mientras se deja morir”, en alusión directa a la gestión actual del gobierno local respecto al Casco Antiguo.