Una nueva invasión zombie llegará a Altea en la noche de Halloween

Las calles de Altea volverán a convertirse en un escenario de ficción postapocalíptica con motivo de la tradicional supervivencia zombie, una cita que cada año atrae a centenares de participantes y visitantes. La actividad será el sábado 1 de noviembre y propone una intensa yincana nocturna que mezclará pruebas, enigmas y sobresaltos desde las 23:00 horas hasta las 4:00 de la madrugada.

La cita, impulsada por la concejalía de Juventud junto al equipo Love Zombies, que ya se ha consolidado como una de las actividades más esperadas del otoño en Altea, invita a vecinos y turistas a vivir una experiencia inmersiva en la que tendrán que esquivar hordas zombies, superar pruebas y resolver adivinanzas para sobrevivir a la amenaza del virus ficticio que invadirá el municipio por una noche.

El responsable de la concejalía de Juventud, Germán Manjón, ha animado a la participación destacando que “la ciudadanía que quiera librar a Altea del virus con el que ha sido infectado podrá hacerlo junto al equipo de Love Zombies, porque la diversión está asegurada”.

Las inscripciones ya están abiertas a través de la página oficial de la organización www.eventoszombies.com. Hasta el 19 de octubre, los precios se mantienen en 25 euros para superviviente individual, que subirán a 29 euros en la siguiente fase, mientras que el coste para grupos de 5 supervivientes es de 95 euros y 19 euros para participar como zombi individual.

La actividad está abierta a todo el público, aunque los menores de 18 años deberán entregar una autorización firmada por sus padres, madres o tutores legales, disponible tanto en la web como en el código QR incluido en el cartel promocional del evento.

Durante más de cinco horas, la trama de la supervivencia zombie se desplegará en el casco urbano alteano, generando una atmósfera única en la que se mezclan ficción, adrenalina y cultura urbana. La iniciativa no solo supone un atractivo para los más jóvenes, sino que también se ha consolidado como un elemento de dinamización turística y de ocio alternativo, que cada año convierte a Altea en foco de visitantes llegados de distintos puntos de la comarca y la provincia.