La Diputación de Alicante activa un dispositivo invernal para incidencias en las carreteras provinciales hasta abril

La Diputación de Alicante ha activado el dispositivo de vialidad invernal en la red de carreteras de su titularidad para hacer frente a posibles incidencias derivadas de las condiciones meteorológicas adversas durante los meses más fríos del año. El operativo estará en funcionamiento desde diciembre y se mantendrá activo hasta el 1 de abril de 2026, periodo considerado de mayor riesgo por nevadas y heladas.

El protocolo contempla la movilización de medios humanos y materiales distribuidos estratégicamente en distintos puntos de la provincia, especialmente en aquellas zonas y tramos con mayor probabilidad de episodios de hielo o nieve. Los equipos están preparados para intervenir de forma inmediata ante cualquier incidencia que afecte a la circulación.

El diputado responsable del área de Carreteras, Arturo Poquet, ha detallado que, además de la respuesta ante emergencias, se desarrolla una labor preventiva continua, que incluye recorridos de supervisión de la red viaria y la extensión de sal en los días y tramos con riesgo de heladas.

La red de carreteras gestionada por la Diputación de Alicante cuenta con cerca de 1.000 kilómetros, dando acceso a la práctica totalidad de los 141 municipios de la provincia. Muchas de estas vías permiten llegar a localidades de menor población, algunas situadas en áreas de montaña donde pueden producirse problemas puntuales de vialidad invernal.

Para este periodo, el dispositivo moviliza diez capataces, 60 auxiliares de carreteras, 10 naves almacén, 10 camiones con grúa, 10 furgonetas, tres expendedoras de sal y tres cuchillas quitanieves. Además, se cuenta con la colaboración de tres empresas externas con medios propios y disponibilidad permanente ante emergencias, incluyendo dos quitanieves adicionales adscritos de forma exclusiva a la red provincial.

Con este despliegue, la institución provincial busca garantizar la seguridad y la continuidad del tráfico en las carreteras provinciales durante los episodios meteorológicos adversos propios del invierno.